martes, marzo 17, 2009

Autoridades del Altiplano impiden al comité Atenco entrevistarse con Ignacio del Valle


"Hay alerta máxima" contra Del Valle, Felipe Alvarez y Héctor Galindo, indicó la directora del penal, Jessica Landeros, a una comisión conformada por el padre Miguel Concha, el obispo Raúl Vera y el actor Daniel Giménez Cacho.

Víctor Ballinas, enviado, e Israel Dávila, corresponsal Publicado: 16/03/2009 18:32

Almoloya de Juárez, Edomex. Integrantes de la campaña nacional e internacional Libertad y Justicia para Atenco, entre ellos el obispo Raúl Vera, el padre Miguel Concha, el actor Daniel Giménez Cacho y otras organizaciones sociales y civiles acudieron al penal del Altiplano en demanda de la libertad para Ignacio del Valle, Felipe Álvarez, Héctor Galindo, y otros 12 presos políticos más de aquel municipio mexiquense; sin embargo les fue impedido entrevistarse con ellos.

Los inconformes integraron una caravana que partió desde las cinco de la mañana desde San Salvador Atenco e hizo escala en el Monumento a la Revolución, en el Distrito Federal para arribar a este penal, en donde una comisión ingresó a dicho centro con la intención de entrevistarse con los detenidos, sin embargo, les fue negada la petición de visita, con el único argumento de que “había alerta máxima” para esos internos.
En posterior conferencia de prensa, la Comisión manifestó que expusieron a la directora del penal, Jessica Abigail Landeros Pelayo, que dichos presos están ahí por motivos políticos, que el sistema de justicia se ha utilizado en contra de ellos en forma facciosa, que “no son delincuentes ni han cometido delito alguno, que son integrantes de un movimiento en defensa de la tierra”.

El padre Miguel Concha, dio lectura al emplazamiento a la Secretaría de Gobernación, para que a la brevedad se reúna con los familiares y los abogados de los detenidos, y con las autoridades del gobierno del estado de México para facilitar el traslado de los presos a otros penales, ya que “no son presos de alta peligrosidad”.

La caravana que arribó al penal estuvo conformada por 33 automóviles y tres autobuses. En el colectivo se encontraba la esposa de Ignacio del Valle, Trinidad Ramírez, así como decenas de representantes e integrantes de organizaciones civiles sociales culturales, estudiantiles, artística que ante la respuesta de las autoridades lanzaron la consigna “Volveremos, volveremos para visitar a nuestros presos”.