■ Las acciones de hace dos años, muestra de una política represora, consideran
■ No se trata de operativos, sino de los abusos contra activistas: Martínez della Rocca
■ No se trata de operativos, sino de los abusos contra activistas: Martínez della Rocca
Gabriela Romero Sánchez
La Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) pidió al gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto, liberar de manera inmediata e incondicional a todos los presos políticos de San Salvador Atenco y Texcoco.
El punto de acuerdo presentado por los diputados perredistas Tomás Pliego Calvo y Salvador Martínez della Rocca ante el pleno de la ALDF el pasado martes, fue remitido ayer al gobernador mexiquense.
En los considerandos de éste se establece que los hechos ocurridos en San Salvador Atenco “dan muestra de una política gubernamental que ha optado por la represión y la criminalización de la protesta e inconformidad ciudadana, en vez del diálogo, el acuerdo y la construcción de consensos”.
Se advierte, además, que durante el operativo desplegado por los cuerpos de seguridad del estado de México y la Policía Federal Preventiva se trasgredió el derecho a la vida en agravio del menor Javier Cortés y se puso en grave riesgo el derecho de la vida en perjuicio a más de 300 personas detenidas.
Para hablar en contra subieron a la tribuna los priístas Martín Olavarrieta y Jorge Schiaffino, el primero para manifestar que la Asamblea Legislativa no podía “invadir mediante un exhorto al gobierno de cualquier estado solicitando la liberación inmediata de lo que desconozco por qué se consideran presos políticos”. Mientras que el segundo solicitó verificar el quórum y luego trató de revirar: “es una tristeza que vengan aquí a hablar de autoridad moral, con el News Divine y todo lo que está pasando”.
En su turno, el perredista Martínez della Rocca espetó a sus homólogos que la discusión no versaba en los operativos, sino en un profundo análisis de “gente que está encarcelada, que le han metido más años de prisión que a un conjunto de asesinos como los genocidas del 68 y que están libres”.
Tras alrededor de hora y media de discusión, el punto de acuerdo se sometió a votación, la cual dio como resultado: 18 votos a favor, incluyendo los de Esthela Damián y Daniel Salazar, ambos de Nueva Izquierda; 13 en contra de los priístas y panistas, y siete abstenciones del Panal y PRD-NI.
Los días 3 y 4 de mayo de 2006, San Salvador Atenco y Texcoco fueron cercados con un operativo en el que participaron más de 3 mil policías federales y estatales, el cual dejó como saldo la muerte de Édgar, un menor de edad, por causa de una lesión en la cabeza provocada por un petardo, y del estudiante universitario Ollín Alexis Behumea, así como la violación de siete mujeres y el abuso sexual a otras 16, más de 200 personas detenidas, de las cuales 27 continúan presas, entre otros Ignacio del Valle, Felipe Álvarez y Héctor Galindo sentenciados a 112 años de prisión.