Pobladores de Tecoanapa, municipio de donde era originario Alexander Mora, participaron en la marcha. Foto: Octavio Gómez |
TECOANAPA, Gro. (apro).- Con lágrimas en los ojos, Hugo Mora Venancio, hermano de Alexander, uno de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa y que hace unos días oficialmente fue declarado asesinado, exigió al presidente Enrique Peña Nieto: “Quiero que me diga a la cara que olvide a mi hermano y supere este dolor; quiero ver si tiene el valor de decirle a mi padre en un acto público que olvide a su hijo”.
Lo anterior ocurrió durante una marcha realizada en este lugar enclavado en la parte serrana de la región de Costa Chica, donde los inconformes exigieron la desaparición de poderes en la entidad y plantearon la conformación de consejos ciudadanos en los municipios.
Ello, con el propósito de “desterrar la corrupción gubernamental” y “la narcopolítica” que tiene sumida la entidad en una crisis de ingobernabilidad, impunidad y violencia.
La movilización, donde participaron familiares y amigos del humilde estudiante victimado presuntamente por sicarios y conocido en su pueblo como Chande o La Roca, fue denominada: “Alexander, tu lucha no fue en vano”.
En la protesta también estuvieron miembros del magisterio disidente y normalistas de Ayotzinapa, así como los padres de los otros siete estudiantes originarios de este municipio y que siguen desaparecidos con el resto de sus compañeros.
Con vestimenta oscura y lanzando consignas contra Peña Nieto, el nutrido contingente partió en marcha cerca de las 15:00 horas de la entrada principal de la cabecera municipal de Tecoanapa, que en náhuatl significa “lugar de jaguares”.
Luego de recorrer un tramo de la carretera interestatal que conecta la región Centro con la Costa Chica, los manifestantes arribaron al zócalo del poblado, donde realizaron un mitin.
De esta forma, habitantes de Tecoanapa salieron para sumarse a la muestra de repudio contra el gobierno y la exigencia de justicia por el caso de la masacre y desaparición de los normalistas de Ayotzinapa.
La protesta pacífica fue vigilada en todo momento por dos helicópteros de la Marina y la Policía Federal, que sobrevolaron el área.
Se trata de la misma zona donde el año pasado sus habitantes decidieron armarse para enfrentar directamente a la delincuencia y en que retuvieron y expulsaron a un centenar de militares acusados de presuntos nexos con el narco en el poblado de El Pericón, el lugar donde nació el normalista asesinado supuestamente por sicarios coludidos con las autoridades.
En su discurso, Hugo Mora Venancio, hermano mayor de Alexander, reprochó la indolencia gubernamental y cuestionó la versión oficial sobre la campaña de exterminio en contra de los normalistas de Ayotzinapa.
“No cabe en mí la incertidumbre de tus últimos momentos; en dos fragmentos redujeron tu sueño de ser nuestro maestro rural de Ayotzinapa”, expresó el joven frente a la plaza de Tecoanapa.
Luego soltó con voz llena de indignación: “La impotencia e injusticia no caben en mí, maldito gobierno. Tu lucha no será en vano, te marchaste sin aviso, ya estás con mamá; recibe un abrazo”.
El hermano mayor del estudiante victimado de 19 años emplazó a Peña Nieto a decirle a él y su familia, de frente en un acto público, que superen el dolor, como lo hizo la semana pasada en un acto oficial ante a empresarios en el puerto de Acapulco.
“Pudieron terminar con tu vida pero no con tus ideas, por eso abrazamos tu bandera libertaria y haremos eco donde hay injusticias”, expresó Hugo Mora, quien recordó momentos en el campo cuando tomaba café con su pequeño hermano durante las jornadas de siembra de maíz.
Por su parte, Ezequiel Mora Chora, padre de Alexander, y su hija menor permanecieron en su casa en el poblado de El Pericón, donde siguen velando un cuerpo ausente en medio de un dolor agudo.
Por su parte, Ezequiel Mora Chora, padre de Alexander, y su hija menor permanecieron en su casa en el poblado de El Pericón, donde siguen velando un cuerpo ausente en medio de un dolor agudo.
En esta fecha emblemática para la comunidad católica, en vísperas de celebrar a la Virgen de Guadalupe, decenas de peregrinos llegaron a la humilde vivienda de la familia Mora Venancio para expresar, con lágrimas en los ojos y cantando alabanzas, su solidaridad con los dolientes.
Después del mitin en la plaza de Tecoanapa, los inconformes se trasladaron en caravana al poblado de El Pericón, ubicado a 10 kilómetros sobre la carretera interestatal Tierra Colorada-Ayutla de los Libres.
“Don Cheque, queremos decirles que no van a estar solos y que junto a ustedes vamos a seguir exigiendo justicia”, expresó un integrante del magisterio disidente, quien advirtió que seguirán protestando hasta encontrar al resto de los normalistas desaparecidos y para que se castigue a los responsables de la barbarie.