Stella Calloni
Corresponsal
Periódico La Jornada
Miércoles 27 de mayo de 2015, p. 10
Miércoles 27 de mayo de 2015, p. 10
Buenos Aires.
Bajo la lluvia, en uno de los primeros días fríos del año, familiares de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos hace ocho meses en Iguala, Guerrero, marcharon al frente de mexicanos residentes aquí y de organizaciones sociales, en una campaña internacional
para evitar que el gobierno de ese país cierre el caso.
Desde el tradicional Obelisco, en el centro de la ciudad, los manifestantes fueron a la cancillería argentina, donde entregaron un documento con una petición de ayuda y solidaridad para que avance la investigación y que no sea archivado este caso, ni otros semejantes, sin hacer justicia. Luego se dirigieron a la Plaza de Mayo, el mismo lugar donde comenzaron las marchas de las Madres de Plaza de Mayo en la pasada dictadura (1976-1983).
Como lo hicieron aquí las madres de miles de desaparecidos en tiempos dictatoriales, los familiares de los estudiantes de Ayotzinapa gritaron
Vivos se los llevaron, vivos los queremos. Entre los manifestantes estaban Nora Cortiñas, de Madres Fundadoras de Plaza de Mayo, y otras figuras de organismos de derechos humanos y sobrevivientes de la dictadura, quienes mostraron su solidaridad con la caravana que llevan adelante
quienes también buscan verdad y justicia.
Durante su paso por Córdoba, Rosario y Buenos Aires, los familiares de los normalistas desaparecidos difundieron entre diversos sectores y en universidades la información sobre lo sucedido hace ocho meses.
La Caravana 43 Sudamérica, con sus peticiones, tiene la esperanza de lograr que los gobiernos de la región pidan a su homólogo de México que el caso se esclarezca y
se investigue hasta llegar al fondo de la verdad, sin que se interponga ningún obstáculo.
En tanto, la embajada de México aquí, mediante un comunicado, ratificó el compromiso de su gobierno en la disposición de esclarecer los hechos.