Una vez más en nuestro país se comenten abusos en contra de la población. Ejemplo claro de esto es el encarcelamiento a todas luces ilegal de Ignacio del Valle, Héctor Galindo y Felipe Álvarez, tres luchadores sociales que injustamente les han impuesto condenas carcelarias excesivas y que violan los derechos humanos, llevando a cabo abusos permanentes en contra de ellos y dándoles el mismo trato que a los secuestradores, grandes narcotraficantes o criminales.
Se corre el gran riesgo de que en México la lucha social se considere un delito y se criminalice, y que esta forma de aplicar justicia por parte de las autoridades federales y del gobierno del estado de México sea la manera de acallar a todas las voces discordantes de las políticas oficiales. Por ello, exigimos la libertad inmediata de los presos políticos de Atenco y el pleno respeto a sus garantías individuales.
Luis Meneses Murillo, jefe delegacional en Gustavo A. Madero
