Señor licenciado Felipe Calderón: ¡Libertad, libertad, a los presos por luchar! Éste fue el grito unánime de las más de diez mil personas que se reunieron el 25 de noviembre en el auditorio del Sindicato Mexicano de Electricistas, por el noveno aniversario de la muerte de José de Molina, cantautor del pueblo, acto en el que participamos más de 30 artistas, de las 11 a las 23 horas.
La mayor ovación fue para Rosario Ibarra y Trinidad Ramírez del Valle, Martha Pérez, Catalina González y Gerardo González, de Atenco. Estaban presentes las esposas, familiares y amigos de los tres compañeros aún secuestrados desde el 3 de mayo de 2006 –hace 552 días– en el Penal de Máxima Seguridad del Altiplano, antes La Palma. La sentencia de 67 años de cárcel a Ignacio del Valle es absurda y sin sentido, si se la compara con la de siete años que se da a los narcotraficantes. Esta injusticia es sólo venganza del ex presidente Vicente Fox, todo porque los campesinos de Atenco, por defender su tierra machete en mano, le echaron a perder al ex presidente su negociazo en dólares del “nuevo aeropuerto”.
Señor licenciado Felipe Calderón, usted declaró a la pensa nacional: “La libertad de expresión es una realidad cotidiana en México”. Si “los medios juegan un papel protagónico en la construcción de un México más democrático y más libre”, como usted afirmó, que sea este medio, el de nuestro periódico y su Correo Ilustrado, donde expresemos el clamor de la mayoría de los mexicanos CNDH, Centro Agustín Pro, unido a la denuncia internacional; Human Rights Watch; Comisión Civil Europea de Derechos Humanos y la declaración de Amnistía Internacional: Represión y violencia.
Para Navidad y Año Nuevo, en nombre de la libertad: la libertad de Ignacio del Valle, de Felipe Álvarez y de Héctor Galindo Cochicoa. ¡Que vuelvan a abrazar a su familia y a continuar su vida digna de cultivar la tierra mexicana!.
Comité 68: Fausto Trejo, Leopoldo Ayala y Cayo Vicente