jueves, agosto 20, 2020

Armas de alto poder y explosivos, en los ataques a tzotziles de Aldama

 

 Imagen de Cotzilnam, Chiapas.Foto cortesía de la comisión de desplazados
 
Periódico La Jornada
Jueves 20 de agosto de 2020, p. 15

Siguen los ataques armados contra diversas comunidades tzotziles del municipio de Aldama, en los Altos de Chiapas, mismos que, siendo crónicos, se han agudizado desde el viernes. Las agresiones son perpetradas por grupos civiles armados de Santa Martha, Chenalhó. Desde Aldama, La Jornada recibe reportes constantes sobre los ataques, tanto del origen de los tiros como de las poblaciones objetivo.

Un viejo conflicto de límites por 60 hectáreas entre Aldama y Chenalhó ha derivado en una situación donde se disparan armas de alto poder y se lanzan explosivos sólo desde un lado. Sin embargo, las versiones oficiales dan a entender que existe un enfrentamiento entre dos bandos, y lo mismo que los medios locales, dan crédito sólo a la información dada por el gobierno municipal de Chenalhó y los grupos de Santa Martha, quienes se presentan como víctimas de Aldama. Este miércoles, el grupo paramilitar hizo circular un video insólito, presentándose en sociedad.

No obstante, según todos los reportes in situ, existe una vasta operación de hostigamiento, cerco y ataque contra comunidades de Aldama, desde las cuales no hay evidencias de disparos.

El martes se informó de un muerto en el centro de Santa Martha, cuyos pobladores culparon a los de Aldama. Presuntamente, el gobierno federal intervino para calmar los ánimos, según expresó en redes sociales Misael Rojas, vocero del subsecretario de Derechos Humanos, Migración y Población de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, y dio por buena la versión del enfrentamiento.

Dadas las circunstancias reales, considera Pedro Faro, director del Frayba y observador atento del conflicto, resulta muy improbable que los indígenas de Aldama pudieran atacar y presuntamente matar a una persona en el centro de Santa Martha, donde por lo demás suceden cosas muy inquietantes.

Esta mañana se difundió en redes sociales que un grupo de civiles desarmó al destacamento de la policía estatal en dicha comunidad: fueron despojados de sus armamentos de cargo y municiones por un grupo de 80 pobladores. Siendo un total de 20 armas, entre largas 5.56 mm y cortas de 9 mm. Hasta el momento los comuneros del sector Santa Martha mantienen en su poder las armas.

En tanto, a las 21 horas del día 18, la policía estatal preventiva se retiró de la comunidad de Tabac (Aldama) por las constantes agresiones que recibe el poblado, y prosiguieron los disparos hacia la el poblado, según reportaron los desplazados la medianoche del 19, así como de la concentración de civiles armados en Santa Martha, una vez que se replegaron la policía estatal y la Guardia Nacional.

De acuerdo con el medio local El Imparcial, se habría suscitado un enfrentamiento: los ataques entre ambos bandos (sic) comenzaron pasada la medianoche de este martes, cuando grupos de Aldama arremetieron a balazos a pobladores de Chenalhó, lo que generó la reacción. Esa versión sería del alcalde de Chenalhó, Abraham Cruz Gómez, quien exige el desarme de Aldama. Todo indica que nos encontramos ante un nuevo caso donde los patos les tiran a las escopetas. En otro video, el edil de Aldama, Adolfo Victorio Gómez, exige con desesperación la presencia de los tres niveles de gobierno.