dom, 19 jun 2016 11:36
San Salvador Atenco, Méx. Integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) y pobladores de 15 comunidades de Atenco y Texcoco presentaron una queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para solicitar la implementación de medidas precautorias debido a que, ante su oposición contra la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), se han cometido actos de represión similares a los de 2006.
A ello se suma que el gobierno mexicano promueve un clima de tensión y temor en la población para facilitar la imposición del megaproyecto, agregan.
Los quejosos argumentan que son víctimas de hostigamiento, agresión verbal y física dentro de sus propias tierras ejidales por parte de elementos de la Policía Federal, Ejército Mexicano, la Marina, y las policías estatal y municipales de Atenco y Texcoco, quienes realizan incursiones con armas de fuego para realizar desalojos violentos en las parcelas de quienes se oponen al proyecto aeroportuario.
"Todo ello violenta, entre otros, los derechos a la vida, integridad personal, posesión colectiva de sus tierras, medio ambiente sano, salud, alimentación, agua, vida digna e identidad social.
“Solicitamos a la CNDH medidas cautelares para efecto de que se garantice nuestra integridad personal, nuestra propia vida, así como nuestros derechos a la consulta libre, previa e informada respecto del megaproyecto que se pretende instalar en nuestras tierras”, dice la queja.
El abogado del FPDT, Ricardo Arturo Lagunes Gasca, informó que la queja fue presentada el pasado viernes ante la oficialía de partes de la CNDH y recibida con el número de 56769/2016.
En la queja se expone que ante el inicio de obras de construcción del NAICM, por parte de la Presidencia de la República, la SCT, la Semarnat y la Conagua, "sin consulta libre, previa e informada”, se pone en grave riesgo el desequilibrio ecológico de la zona del ex vaso del Lago de Texcoco, considerada por instancias gubernamentales como un Área de Importancia para la Conservación de Aves y como un Área Hidrológica Natural Prioritaria, así como por su función natural de vaso regulador que evita inundaciones en la región y en la zona oriente del Valle de México.
"La instalación del macro proyecto en la zona del vaso del ex Lago de Texcoco no solamente provocará mayores inundaciones, sino colocará a la población de la región y de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México en condiciones críticas para acceder al agua potable y ello pondrá en grave riesgo la salud, alimentación y la vida digna de las comunidades agraviadas.
“Asimismo, el impacto a la flora y fauna que habita y/o transita en la región representará daños y un desequilibrio ecológico de imposible reparación con graves repercusiones a la salud, alimentación y vida digna de los pueblos de la región”.
En el documento de 14 hojas, los miembros del FPDT y los pobladores de las 15 comunidades, realizan un resumen de su lucha y de las agresiones y represiones que han sufrido desde 2001, cuando el ex presidente Vicente Fox emitió los decretos de expropiación de sus tierras para la edificación del proyecto aeroportuario, y que en 2002 lograron echar abajo. En esta lucha fue asesinado el campesino José Enrique Espinosa, asunto que rememoran y narran la represión y toma del poblado de Atenco en mayo de 2006, donde fueron detenidos más de 200 campesinos, violaron a decenas de mujeres y asesinaron a los jóvenes Javier Cortés y Alexis Benhumea. Detallan también las agresiones y ataques que han sufrido en los últimos meses con la reactivación y construcción del NAICM.
Destacan que a partir del 2 de septiembre de 2014, fecha en que el gobierno mexicano hace el anuncio oficial de la implementación del mega proyecto aeroportuario, se realiza la obra sin que se efectuara hasta la fecha un proceso de consulta libre, previa e informada con los habitantes de los pueblos afectados, ni con los habitantes de la zona metropolitana de la Ciudad de México -que por el impacto serían afectados-, para conocer con elementos objetivos y técnicos la viabilidad del mega proyecto y sobre el impacto socio medio ambiental.
"Además del hermetismo del gobierno mexicano para brindar el acceso a toda la información sobre el proyecto, se ha implementado un mecanismo violatorio a los derechos humanos y al derecho de los pueblos indígenas y originarios para acceder a la propiedad de la tierra de los pueblos donde se pretende instalar el macro proyecto, a través de la compra ilegal de tierras ejidales (propiedad social) y promoviendo la realización de asambleas ejidales (con campesinos que no lo son) en las que el núcleo de población ‘autoriza’ o ‘consiente’ la desincorporación de las tierras de uso común para transformarlas en propiedad privada, de tal forma que las tierras queden excluidas del régimen ejidal.
"Debido a que el gobierno mexicano en el año de 2001 no logró vía decreto presidencial expropiatorio acceder a las tierras de los pueblos propuestos beneficiarios, ahora pretende imponer el mega proyecto utilizando a los representantes ejidales y presidentes municipales de los pueblos de la región para acceder a la propiedad de las tierras, mediante la celebración fraudulenta de asambleas con las que se pretende simular un consentimiento de la privatización de las tierras ejidales, pero sin un proceso de consulta libre, previa e informada de conformidad a los estándares del sistema interamericano. Esta situación genera alta inconformidad social y fragmenta el tejido social interno comunitario de los propuestos beneficiarios al fomentar la división entre familias (entre quienes están a favor o no del “progreso”) ante la falta de información objetiva, amplia y suficiente”, argumentan en la queja los miembros del FPDT.
La queja la firman integrantes del FPDT y habitantes de los pueblos de Santa Isabel Ixtapa, San Cristóbal Nexquipayac, San Francisco Acuexcomac, San Salvador Atenco, Zapotlán, Colonia Francisco I. Madero, La Magdalena Panoaya, San Andrés Riva Palacio, San Miguel Tocuila, Santa Cruz de Abajo, San Felipe, Colonia Nezahualcoyotl, San Luis Huexotla, San Bernardino y Santiago Cuautlalpan.