Critican que hasta la fecha no se investigue a militares
La caravana de padres de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala estuvo en Cuernavaca, MorelosFoto Rubicela Morelos
Rubicela Morelos Cruz
Corresponsal
Periódico La Jornada
Viernes 17 de febrero de 2017, p. 16
Viernes 17 de febrero de 2017, p. 16
Cuernavaca, Mor.
Los padres y madres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, Guerrero, que participan en la caravana nacional que recorre diversas entidades del país para demandar la presentación con vida de sus hijos aseguraron en su paso por Morelos que el gobierno federal sigue ocultando la verdad del caso.
El vocero de los padres de los 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa, Felipe de la Cruz, dijo que ninguno de los tres titulares de la Procuraduría General de la República que han llevado el caso durante dos años y cuatro meses ha dado a conocer dónde están los 43 normalistas, ni a los autores intelectuales de la muerte de otros tres.
Ya quedó claro, por pruebas que hemos obtenido, que los autores materiales de la desaparición forzada de los 43 normalistas fueron los policías municipales de Iguala y de Huitzuco, así como policías federales y militares, quienes también participaron en los hechos, manifestó.
El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, nos decía que ya había detenido a los supuestos delincuentes, de nada nos sirve tenerlos a todos; los autores materiales llevaban uniformes, se llevaron a nuestros hijos en patrullas. De los militares, no hay ninguno detenido, ni siquiera son investigados, deploró.
Dijo que las balas usadas contra tres de los normalistas que fallecieron en septiembre de 2014 fueron fabricadas por la Secretaría de la Defensa Nacional,
y hay pruebas, los autores materiales de la desaparición de los jóvenes fueron el Ejército y la policía. También de las muertes de Julio César Ramírez, Daniel Solís y Julio César Mondragón.
Arguyó que la protección hacia los militares proviene del gabinete presidencial o de la secretaría de Gobernación, porque las autoridades castrenses de Guerrero fueron premiadas con cargos en Ciudad de México, después de que pasó el escándalo internacional por la embestida en Ayotzinapa.